A dulcian-player nun in the convent of San Pablo in Cáceres (1642)
Ruiz Jiménez,
Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988
Abstract
In 1642, Margarita Petronila de Porras entered the convent of San Pablo in Cáceres, as a dulcian-player nun. She was the sister of the famous ministril Pedro de Porras, who may have been her teacher and an important agent in the transmission of musical repertoire to this Franciscan monastery.
Keywords
recruitment of musicians , teaching , women and musical networks project , Margarita Petronina de Porras (dulcian player, Franciscan nun) , Francisca de Solis (Franciscan nun) , Diego de Ulloa Becerra (Knight of the Order of Calatrava, regidor) , Pedro de Porras (treble wind player) , Jerónimo Martín de Porras , Mencía de Escobar , dulcian player
El convento de San Pablo fue construido en el siglo XV sobre una edificación más antigua que funcionó como beaterio. Fue habitado por franciscanas de la Orden Tercera.
Poco se sabe sobre la actividad musical desarrollada en este cenobio franciscano, de la cual da testimonio un documento que Pilar Barrios Manzano publicó en 1980. Se trata de una escritura otorgada el 3 de junio de 1642 ante el escribano público cacereño Gonzalo Aldana Ulloa. En ella, la abadesa Francisca de Solis y el resto de la comunidad otorgan un poder a Diego de Ulloa Becerra, caballero de la Orden de Calatrava, vecino y regidor de la villa de Cáceres, para que en su nombre procediera a establecer un contrato con el ministril Pedro de Porras que, en ese momento, servía como tal en la “capilla real de la Encarnación de la dicha villa de Madrid”, donde estaba avecindado. El motivo del contrato era la admisión como monja en el convento cacereño de Margarita Petronila de Porras, “bajona”, hermana del citado ministril, para que ejerciera como tal:
“A que vendrá a este convento a usar el oficio de tal bajona y obligarnos a que la recibiremos en él por monja, donde se le dará su profesión, sin que por ella haya de pagar docte, propinas ni otros derechos y que se le dará trecientos reales para ayudar a la venida a el dicho convento”.
El documento nos informa que Margarita Petronila de Porras era natural de la ciudad de Trujillo (Cáceres) e hija de Jerónimo Martín de Porras, difunto, y de Mencía de Escobar que residía en ese lugar.
Estamos ante un ejemplo de monjas músicas a las que sus habilidades como cantoras o instrumentistas les permitían profesar en un convento sin tener que abonar a esta institución el abultado montante de la dote. La presencia de monjas bajonistas fue relativamente frecuente en muchos conventos hispanos, ya que con este instrumento podía suplirse la voz del bajo en la polifonía, además de usarse para dar el tono a las cantoras y sostener el canto gregoriano. Como ya dilucidó José Antonio Gutiérrez Álvarez en su tesis doctoral (2018), el hermano de Margarita Petronila de Porras no pudo ser el famoso ministril sacabuche de la capilla real Pedro de Porras Morales que, en 1623, imprimiría, probablemente en Madrid, el único libro de ministriles de estas características del que tenemos noticia, pero del que no se conoce ningún ejemplar ni referencias a su contenido, ya que había fallecido el 19 de marzo de 1633. Como Gutiérrez apunta, es más que probable que su hermano fuera el homónimo Pedro de Porras que fue nombrado ministril tiple de la villa de Madrid el 5 de julio de 1632, corporación a la que seguía sirviendo en 1643, cargo que pudo haber simultaneado con los servicios en la capilla de música de la Encarnación, como fue el caso de otros instrumentistas que compatibilizaron sus actuaciones con ambas corporaciones.