Luthiers in Jaén during the first quarter of the 16th century
Ruiz Jiménez,
Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988
Abstract
A visit to the Archivo Provincial de Jaén has allowed me to document the presence in this city of a group of three luthiers, who lived there, on a stable basis, from the end of the 15th century and during the first quarter of the 16th century, making instruments for their neighbours and those in the area of influence of that city.
Keywords
renting a house , Marcos Fernández (luthier) , Juan Sánchez de Guadalupe (luthier) , Bartolomé Téllez (luthier) , luthier
Una incursión en el Archivo Provincial de Jaén me ha permitido documentar la presencia en esta ciudad de un grupo de tres violeros, los cuales residían en ella, de manera estable, desde finales del siglo XV y durante el primer cuarto del siglo XVI, construyendo instrumentos para sus vecinos y los del área de influencia de esa ciudad. La mayor parte de los contratos localizados son de compraventa o arrendamiento de casas, por lo que no nos permiten conocer datos sobre su actividad profesional, pero sí algunos detalles personales y de su relativa solvencia económica.
* El primero de ellos es Marcos Fernández. Si asumimos que se trata del mismo Marcos Fernández, yerno de Esteban Pizarro, que el 10 de marzo de 1493 toma en arriendo una casa en el arrabal de Jaén, propiedad de la cofradía de San Francisco, por tres años y una renta anual de 1.300 maravedís, se trataría del primer violero documentado en Jaén. El 12 de noviembre de 1509, ya aparece identificado como Marcos Fernández, “violero”, casado con Francisca Vera, vecinos en la collación de Santa María, en otro protocolo notarial que se realiza en su casa, ante el escribano Gonzalo Rodríguez, y en el que se citan también “las casas de Juan Sánchez de Guadalupe, “violero”, residente en la misma demarcación parroquial. Lo volvemos a encontrar en un tercer contrato que pasó ante el escribano Cristóbal de Molina, fechado el 12 de febrero de 1522, el cual se firma “en las casas de Bartolomé Téllez, violero”, que está presente como testigo y en el que tenemos la rúbrica de Marcos Fernández.
* El segundo es Juan Sánchez de Guadalupe, residente en la collación de Santa María, ya citado tangencialmente en el contrato de 1509 y al que Pedro Jiménez alude a través de otro protocolo de 1505. Lo volvemos a encontrar en un tercer protocolo, fechado el tres de noviembre de 1509, en una referencia también indirecta, en el otorgamiento de un poder de procurador.
* El tercero es Bartolomé Téllez, al cual he hecho mención, como testigo, en el contrato de 1522 referido anteriormente y que previamente aparece en otro protocolo de arrendamiento de casa que pasó ante el escribano Francisco Salido, fechado el 14 de julio de 1516.