Palm Sunday procession at the cathedral of Seville
Ruiz Jiménez,
Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988
Keywords
procession , Gloria laus (hymn) , Ave Rex noster (antiphon) , sanctus feriales , response , cathedral chapter , music chapel of the cathedral , succentor , Francisco Guerrero (composer, chapel master) , Alonso Lobo de Borja (composer, chapel master) , Luis Bernardo Jalón (composer, chapel master)
La ceremonia de “La Entrada en Jerusalén” tenía lugar el Domingo de Ramos y con ella se iniciaba la Semana Santa. Partiendo del coro, la procesión salía al exterior por la puerta del Nacimiento y recorría el perímetro de la catedral, por debajo de las gradas, al tiempo que se cantaban una serie de antífonas y responsos, para dirigirse a un altar que se había dispuesto en la puerta del cabildo, en el corral de los Olmos, donde el diácono decía el evangelio según San Mateo. Continuaba la procesión hasta llegar a la puerta de la catedral llamada de la Entrada de Cristo en Jerusalén, mientras se iba cantando la antífona Ave Rex noster. Acabada esta antífona, se iniciaba, en canto llano, el himno Gloria laus, en la parte exterior de la iglesia, mientras que la capilla de música aguardaba en el interior del templo. Una vez cerrada la puerta, comenzaba la ejecución polifónica, alternando con la repetición en canto llano, varias veces. Terminada la ceremonia la puerta volvía a abrirse y la procesión continuaba hasta el coro. Seguidamente tenía lugar la misa del Domingo de Ramos.
El Compendio de las obligaciones que deben cumplir los ministriles y capilla de música de la Santa Iglesia Patriarcal de Sevilla (s. XVIII) nos proporciona la siguiente rúbrica:
“Domingo de Ramos, Sanctus feriales a la bendición de los ramos y en la procesión se canta el verso Gloria laus, de facistol, y a todo da tono un bajón”.
En el año 2005, localicé una versión del himno Gloria laus, a tres voces, que se encontraba integrada en su contexto ritual en un manuscrito de la Biblioteca Capitular. La melodía gregoriana es la que encontramos también en otras fuentes litúrgicas hispalenses y toledanas. La obra presenta un sencillo contrapunto, nota contra nota, en el que se ha combinado la disposición en voces separadas con la pervivencia de una notación y sonoridad arcaica. Podría tratarse de la transcripción de un ejemplo de polifonía improvisada, cuya copia habría sido realizada a finales del siglo XIV o en la primera mitad del siglo XV, por lo que es el ejemplo polifónico más temprano de este himno encontrado en fuentes hispanas.
El inventario de libros de polifonía de la catedral de Sevilla realizado en 1603 recoge, explícitamente, un libro que contenía el “Gloria laus de Ramos”, junto a otras composiciones para la Semana Santa que pudieron haber sido compuestas por Francisco Guerrero, ya que no se encuentran en el inventario de 1588. A mediado el siglo XVII, este himno fue sustituido por la versión compuesta por Luis Bernardo Jalón, a cuatro voces, según consta en la descripción del inventario de libros de 1721. Existe una segunda versión, también a cuatro voces, atribuida a Alonso Lobo, en una copia, probablemente del siglo XIX, a la cual se ha adicionado una partichela para el contrabajo que duplica la voz del bajo. Esta misma obra, anónima, se encuentra en una colección de libretes, de finales del siglo XVIII, con obras destinadas a la Semana Santa y en la que pueden identificarse otras obras del citado libro inventariado en 1721. En mi opinión, probablemente se trata de una atribución errónea y la obra sea la que compuso el maestro Luis Bernardo Jalón.
Queda para la hipótesis si pudieron interpretarse en la catedral de Sevilla las versiones del himno Gloria laus compuestas por Cristóbal de Morales y por Francisco de Peñalosa.