Organs for the Franciscan convents of Guatemala (1598)
Ruiz Jiménez,
Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988
Abstract
In 1598, Fray Antonio Tineo contracted the Flemish organ builder Enrique Franco in Seville to build three organs for the Franciscan province of the Santísimo Nombre de Jesús in Guatemala: one of them for the convent of San Francisco in the city of Santiago de los Caballeros de Guatemala (Antigua Guatemala), another for the convent of the Limpia Concepción de Almolonga (Ciudad Vieja) and the third for an unknown location. These were the first instruments documented in the American dioceses that had the novelty of incorporating the split registers that allowed the simultaneity of two simultaneous timbral combinations on the same keyboard.
Keywords
organ , Antonio Tineo (Franciscan) , Enrique Franco (organ builder) , Francisco Pérez de Cabrera (organist)
El 1 de diciembre de 1598, el franciscano Antonio Tineo, “procurador general del Nombre de Jesús de Guatemala, la que es en la Nueva España”, que en esa fecha se encontraba en Sevilla, contrató con el organero flamenco Enrique Franco, vecino de la collación de Santa María (en 1597 ya residía en el estudio de San Miguel), un órgano de “nueve palmos”. La composición del instrumento debía responder al siguiente proyecto: “un flautado tapado a tono de nueve palmos y más unas octavas del mismo, unas flautas que se entienden flautas y flautado y más unas quincenas y docenas de medio juego arriba y unas trompetas octava abajo del flautado y otras trompetas pequeñas, unnósonis del flautado, y más un temblante y un ruiseñor y se entiende que han de ser los registros partidos, todo de madera será de borne bien acabado en toda perfición y a gusto e contento de personas sabias y entendidas en el arte de la música y según y de la manera que el órgano que yo hice para la Santísima Trinidad, extramuros desta çibdad, que tengo entregado este año...” [http://historicalsoundscapes.com/evento/295/sevilla/es]. Este instrumento es el primero documentado en las diócesis americanas que presentaba la novedad de incorporar los registros partidos que permitían la simultaneidad de dos combinaciones tímbricas simultáneas en un mismo teclado. Como era habitual, se estipula en el contrato que, una vez finalizado el instrumento, sería peritado por uno o más expertos, con frecuencia alguno de los organistas de la catedral. Enrique Franco era, en esa fecha, “maestro de aderezar órganos” de la institución catedralicia, en la cual acababa de quedar vacante la ración asignada al organista por muerte de Francisco Peraza, por lo que asistía el órgano su alumno Francisco Pérez de Cabrera. El encargo de Antonio de Tineo se completaba con: “otros dos órganos del tono del de [la capilla de] Nuestra Señora del Antigua de la santa iglesia de Sevilla, el uno con trompetas y el otro sin ellas y las mixturas que han de llevar han de ser flautado y otras flautas en octava y unas quincenas y docenas de medio juego arriba y en uno con trompetas y entrambos con pajaritos y temblante y los registros partidos todo de madera de borne...”.
El padre Francisco Vázquez, cronista de la provincia franciscana del Santísimo Nombre de Jesús de Guatemala [1714], nos proporciona información sobre el destino de dos de los órganos y de otras imágenes devocionales que fray Antonio Tineo compró en Sevilla en este viaje de 1598:
“Trató de ir disponiendo la misión de religiosos que había de traer, y algunas cosas que la Provincia le había encargado, que de las que aún duran las memorias son estás: el armonioso y sonoro órgano del convento de N. P. S. Francisco de Guatemala [Antigua Guatemala], el órgano de Almolonga [Ciudad Vieja], la imagen de N. Señora de la Limpia Concepción que se venera en la capilla titular de este misterio, en nuestra iglesia de Guatemala, que se hizo y trajo para la de Almolonga, y los caballeros cofrades de Guatemala la aprehendieron, enamorados de su hermosura, obligándose a pagar los costos que hiciese otra en España para Almolonga, que es la linda y garbosa, que con el título de La Chapetona es venerada y milagrosísima en aquel santuario. También mandó esculpir en España N. P. Tineo la imagen de N. P. San Francisco para el retablo del altar mayor de Guatemala y otra muy semejante para las procesiones. La imagen de S. Juan Bautista del retablo mayor de Comalapa, la de San Juan Bautista que está en el de Alotenango. La efigie de Santiago del retablo mayor de la iglesia de Atilán. Y no sé si otras cosas, que se habrán pasado de las memorias, aunque hay muchas y muy estimables de tan gran padre y buen religioso. Todo lo cual trajo cuando volvió de España...”
El convento franciscano de la Limpia Concepción de Almolonga había sido el primero de la orden que se había creado en la Ciudad Vieja, adyacente al barrio de indios cakchiqueles, cuya iglesia tenía por titular al arcángel San Miguel [iglesia de San Miguel Escobar], siguiendo de nuevo el testimonio del cronista Francisco Vázquez:
“El convento de Nuestra Señora de la Limpia Concepción de Almolonga, que fue el primero que tuvo esta Santa Provincia, fundado el año de 1540, cuando estaba allí la ciudad de Guatemala, pueblo que hoy se llama la Ciudad Vieja. Este convento, pues, que hasta entonces había sido atendido como casa solariega y principal de la Religión Seráfica, y fomentado de los prelados, con toda aplicación, aún no había llegado a tener los lucimientos y condecoración que desde el tiempo de P. Fr. Diego de Cubillas se reconoce”.
El tercer instrumento contratado con Enrique Franco pudo colocarse en alguna de las iglesias de los otros veintitrés conventos con que contaba la provincia franciscana del Santísimo Nombre de Jesús de Guatemala en 1600.
Fray Antonio Tineo había llegado al convento de San Francisco en la Antigua Guatemala en 1580, procedente del convento de San Francisco de Albacete. En su nuevo cenobio desempeñará el cargo de maestro de novicios, predicador conventual y lector de casos de conciencia. Fue elegido por primera vez ministro provincial en Tecpán-Atilán, en 1590, siendo reelegido en el mismo cargo en 1600 y 1617. Durante los años que desempeñó este cargo en la provincia del Santísimo Nombre de Jesús de Guatemala, se encargo, como prueba este documento, de proveer a los templos de sus conventos de órganos, libros de coro, imágenes y ornamentos. Falleció en el convento de San Francisco de la Antigua Guatemala en 1627.