Primeros testimonios de la contratación de ministriles en la catedral de Oviedo (1572-1587)

Los datos publicados sobre los ministriles en la catedral de Oviedo en el siglo XVI plantean algunas dudas a la hora de dilucidar la incorporación estable de estos instrumentistas en la institución ovetense. La primera noticia se remonta al 11 de enero de 1572, cuando en los acuerdos capitulares se cita “un maestro... que enseña a tañer flautas y cornetas y ministriles”; ese mismo año, el 7 de noviembre, se debate la necesidad “de comprar [sic] ministriles”. Todo indica que el término aquí, como en el resto de los acuerdos capitulares a los que haré referencia, tiene el significado de los instrumentos aerófonos tañidos por los ministriles (ver nota a pie). El 5 de enero de 1579, el cabildo nombra al ministril Cespedes como responsable o maestro de la capilla de ministriles que se irá formando en esta catedral. A diferencia de otras instituciones, no parece que se contratara a un grupo estable con un funcionamiento independiente previo, sino que se cuenta con un ministril al que se encarga el establecimiento de esta capilla instrumental. El 6 de julio de ese año, Céspedes solicita al cabildo permiso: “para buscar algunos ministriles y flautas y otros aparejos para enseñar...”. Ese mismo día, el cabildo compra al maestro de capilla Juan Misol “ciertas flautas” por cuatro ducados (1.500 maravedís). Simultáneamente, se recurre al conde de Benavente: “para ver si hará merced de algunos [instrumentos], pues tiene muchos y no se sirve de ellos”. El conde responde que los dará si se le ofrece la seguridad de que se le devolverán. El obispo Gonzalo de Solórzano, en cabildo, mostraba su desacuerdo: “puesto que el conde pide fianzas, que se compren antes que no dalas”. Finalmente parece que Céspedes viajó a Benavente y vino con esos instrumentos, los cuales el cabildo mandó que “se asienten todos por recuento”, es decir que se inventariaran para tenerlos bajo control. El 7 de noviembre, se entregan a Céspedes 200 reales (6.800) “para comprar ministriles [sic]”. Probablemente el conde de Benavente finalmente regalará al cabildo ovetense los instrumentos, ya que el 30 de diciembre de 1580, los capitulares acuerdan fundar una memoria en agradecimiento por “los instrumentos para la música de chirimías”. Al parecer, Céspedes se hizo cargo de la capilla de ministriles hasta su fallecimiento, en Leon, el 31 de octubre de 1584. Entre 1584 y 1587, le sucede en sus obligaciones el ministril Lorenzo de San Miguel, bajón y flauta. En estos primeros años estuvieron al servicio de la catedral varios ministriles cuyos nombres se conocen:

- Juan López, sacabuche.

- Pedro Humanes, cornetilla.

- Lucas de Langreo, bajón.

- Juan del Real.

- Marcos Noriega.

- Juan de Manzaneda.

- Gregorio Sánchez.

- Juan Sánchez.

- Ismael.

- Lamberto de Tulmonte.

Durante el resto de la centuria parece que se mantiene una cierta inestabilidad. Entre 1587 y 1595 la capilla de ministriles estuvo bajo la tutela del italiano Andrea de Bérgamo.

Nota: En el Diccionario de Autoridades, t. IV (1734), p. 572, encontramos las siguientes definiciones para los términos “ministriles” y “ministril”:

Ministriles: “se llaman los instrumentos músicos de boca: como chirimías, baxones, y otros semejantes, que se suelen tocar en algunas procesiones y otras fiestas públicas”.

Ministril: “Se llama también el que toca los instrumentos llamados ministriles”.