Primer órgano para la iglesia de Padules (Almería)

En Padules (Almería) fijó su base de operaciones don Juan de Austria el mes de mayo de 1570, durante los últimos coletazos de la Guerra de las Alpujarras, desde donde informaba al rey Felipe II del próximo desenlace de la misma. Formaba parte de la diócesis de Granada y su iglesia, al igual que otras de la zona, tuvo que ser reconstruida a finales del siglo XVI tras la finalización del conflicto. La primera noticia de la presencia de un órgano en la iglesia de Santa María la Mayor data de 1762. Constituye un nuevo ejemplo de instrumentos que fueron construidos a instancias del clero local y gracias a la contribución económica de su propia feligresía, probablemente en un intento de asimilarse a otros núcleos de población vecinos y ante la ausencia de respuesta a su demanda por parte del provisor del arzobispado. 

Véase: http://www.historicalsoundscapes.com/evento/1232/fondon/es

Un memorial de Gabriel Navarro, beneficiado de esta parroquia, da cuenta de ello:

“Habiéndose hecho en esta iglesia a expensas de la devoción de los fieles un órgano de seiscientos ducados [225.000 maravedís], sin el costo de la tribuna y demás necesario para ello, no habiendo contribuido la Fábrica con un solo maravedí, y hallándose don Isidro Cortés con título del Illmo. señor arzobispo para su uso y manejo…”

Solicitaba al provisor que se le dieran setenta ducados de salario anual al citado organista “o lo que fuere del mayor agrado de V.S.”.

Por decreto de 11 de octubre de 1762 se le concedieron 20 ducados (7.500 maravedís) a partir del tercio de abril de 1763.

En un segundo memorial de 1765, el beneficiado Gabriel Navarro confirma los datos del escrito anterior, aunque el precio abonado por el órgano varía, y solicita un aumento de ochenta reales (2.788 maravedís) en el salario para el organista :

“Habiéndose ejecutado un órgano para la iglesia parroquial de dicho lugar de Padules a costa de las limosnas de los fieles devotos de esta población sin que la fábrica para dicha obra haya dado un solo maravedí, siendo órgano que su costo ha excedido de nueve mil reales [306.000 maravedís] que en el partido de Alpujarra no se encuentra otro de su magnitud y circunstancias, como lo han visto y reconocido los jueces hacedores de rentas decimales, y por la piedad de V. S. Illma. se le consignó por renta a dicho órgano veinte ducados anuales y siendo dicha renta tan corta y limitada que no es bastante para ayudar a la manutención del organista que lo está ejerciendo y que dicho organista por la cortedad de su renta se ha despedido y que este es sujeto hábil que lo trata y maneja con el cuidado y solicitud debido y que a faltar este sería dificultoso se encuentre otro de semejante circunstancia y más por lo escaso de la renta…”. 

El informe de la Contaduría Mayor a este memorial, fechado en Granada el 24 de septiembre de 1765, dice:

“Es regular la pretensión que se hace en este memorial y tiene iguales y mayores ejemplares en las iglesias de los partidos de Alpujarra y Valle”.

Dos días después, el 26 de septiembre de 1765, se le concedía al organista el aumento solicitado de 80 reales anuales.