Inventario de instrumentos y libros de música de Alonso Calvo (1561)

El 7 de agosto de 1561, Lucía Ruiz, mujer que había sido de Alonso Calvo, “músico”, realiza inventario de los bienes de su marido, el cual había fallecido “puede haber cinco o seis años” [c. 1555]. Juan de Santillana, pregonero de la villa de Valladolid, “a altas y extendidas voces”, pregonó en la plaza Mayor, plaza de Santa María y plazuela Vieja que los testamentarios de Alonso Calvo iban a realizar el inventario de sus bienes al día siguiente en “las casas de su morada que son a las Cuatro Calles”. El 15 de agosto, Lucía Ruiz presentaba ante el escribano Francisco Cerón el inventario de los bienes de su marido. Se inicia con el vestuario que había quedado, siguiendo a continuación los instrumentos y libros:

- “Ítem, cuatro vihuelas grandes y pequeñas”.

- “Ítem, un libro grande de canto de órgano”.

- “Ítem, cuatro cuadernos de canto de órgano italianos”.

- “Ítem, un cancionero pequeño de canto de órgano”.

- “Ítem, cuatro libros de cifras, dos grandes y dos pequeños”.

- “Ítem, dos libros pautados”.

- “Ítem, dos libros de romance y uno de medecina en romance”.

Un pequeño pero muy interesante inventario de este músico residente en Valladolid, del que se infiere que tañía la vihuela, ya que, además de los cuatro instrumentos, tenía cuatro libros de cifra que debemos suponer que eran para este instrumento, sin que quede definido el carácter impreso o manuscrito de los mismos. A la muerte de Alonso Calvo, c. 1555, ya se habían impreso seis de los libros de vihuelistas españoles en distintos tamaños, dos de ellos, los de Luis de Narváez (1538) y Enríquez de Valderrábano (1547), en Valladolid. Los libros de polifonía vocal responden también a distintos formatos, posiblemente todos de contenido profano, destacando los cuatro libretes “de canto de órgano, italianos”, adjetivo que puede responder tanto al repertorio contenido como al origen de los mismos, en cuyo caso se inferiría que probablemente se tratara de un impreso. Los dos libros pautados podrían indicar que estaban preparados para que el propio Calvo copiara en ellos algunas obras.