Misa sabatina de Nuestra Señora

Entre 1600 y 1604 sirvió al órgano la misa sabatina de Nuestra Señora Arroyo, el organista ciego de la iglesia de San Ildefonso. Estaba patrocinada por la cofradía del Santísimo Sacramento, sita en esta iglesia. El 6 de enero de 1602, la cofradía establece con este organista un concierto por el cual se le pagaría por tercios de cuatro meses 33 reales (1122 maravedís) anuales. Por este contrato se obligaba a tocar los sábados a la misa de Nuestra Señora, a todas las misas del mes y a las doce fiestas de “la cofradía de Nuestra Señora y la principal del Santísimo Sacramento”. Desconocemos cuando se inició esta celebración y cuando cesó.