Antífona Gaude Dei genitrix dotada por Bernal de Cuenca

El 6 de septiembre de 1514, por mandato del cabildo, se escribe en el Libro Blanco de las dotaciones de la catedral de Sevilla la establecida por el racionero organista de esta institución Bernal de Cuenca. Por medio de ella, “el maestro de los mozos de canto llano” debía cantar con ellos, delante del altar de Nuestra Señora de los Remedios (en el trascoro), la antífona Gaude Dei genitrix con el himno Maria mater gratia y al final el verso Ora pro nobis con su oración, “según del tiempo que corre”. Finalizarían el servicio cantando un responso por el alma de Bernal de Cuenca y sus difuntos. Todo ello antes de Nona. Para esta fundación dejó una renta perpetua anual de 1.600 maravedís. En los libros de fábrica de la catedral se consignan como “salve regina y responsos”. María mater gratia es el segundo verso del himno Memento salutis auctor (himno de prima del Oficio Parvo de Nuestra Señora) que en la catedral de Sevilla se cantaba con una peculiar variante melódica.