Campana "espanta albures"

Lope de Vega, en su Comedia famosa del amigo hasta la muerte, vuelve a brindarnos otra breve pincelada del paisaje sonoro hispalense. Guzmán, en el acto tercero, relata a don Bernardo como había sido apresado: “en dando anoche a Julia tu recado fui Leandro de cierta pescadora que sin lumbre en la torre de Sesto me esperaba, cené, brindé por tu salud contengo, incitado de almejas temerarias, pero apenas sonaba espanta albures, ya sabes que es campana de las Cuevas, cuando llamando un envarado destos con seis esbirros, nos metió en la cárcel”. La referencia es al tañido de maitines en la cartuja de Santa María de las Cuevas. La referencia de Lope a la identificación de esta campana por su tañido nos permite calificarlo de soundmark, en la terminología de Raymond Murray Schafer. El sobrenombre de la campana provenía del hecho de que el convento se encontraba en el margen del río Guadalquivir y su tañido debía asustar a los peces (albur es sinónimo de mújol).

La campana que actualmente se encuentra en este campanario ha sido recientemente restaurada por José Carlos Roldán. En la presentación de este trabajo (16-2-2016) se han proporcionado algunos datos sobre la misma. Su artífice fue el campanero alemán, afincado en Sevilla, Zacharias Ditrich, el cual la fundió en 1794, como pone de manifiesto su inscripción: “Zacharias Ditrich nacion aleman a O 1794 [cruz de Calatrava]”. Tiene un interesante grabado en el que se representa a la Santísima Trinidad que le proporcionaría su verdadero nombre. Pesa 28,6 kilos, tiene una altura de 38 centímetros y 36 de diámetro y está afinada en fa.