Restauración del órgano (1997)

El órgano del convento de la Concepción ha sido atribuido a Miguel González Aurioles por la semejanza con otros instrumentos suyos que se han conservado. Este organero desarrolló su oficio en la archidiócesis de Granada al menos entre 1792 y 1840. El propio instrumento nos proporciona información de distintas intervenciones llevadas a cabo en el siglo XIX. La primera y más drástica se encuentra anotada en la cornisa del mueble y tuvo lugar durante la revolución de 1868: “habiendo salido las monjas a Santa Isabel se desmontó por revolución en 19 de septiembre de 1868 y se volvió a colocar en mayo de 1869 por José Jordán y Miguel Rivero”. Otras actuaciones sobre los secretos y fuelles se efectuaron en 1879 por el constructor de pianos y órganos Adolfo Montero Weiss y en 1892 por el organero Luis Montero Gallego. En la década de 1940, el instrumento, que había sufrido un considerable deterioro durante la Guerra Civil, es transformado drásticamente por el organero de origen belga Pedro Ghys. El instrumento fue sometido a una profunda y radical restauración por el Taller de Organería de la Obra Social de la Caja de Ahorros de Granada, a cargo del organero Francisco Alonso Suárez y su oficial José Ignacio Fernández Machado. El concierto de presentación de la restauración tuvo lugar el 2 de noviembre de 1997 por el organista Andrés Cea Galán. Tras la restauración, el instrumento cuenta con 485 tubos y ha quedado como sigue:

Un teclado de 51 notas (do1-re5). Registros partidos entre do3-do#3.