Actividad cultual (1495-1507)

Expulsados los judíos en 1492, en el espacio que ocupaba la judería se inicia la construcción del edificio que iba a albergar a la catedral. Cuando Jerónimo Münzer visita la ciudad, en octubre de 1494, el edificio estaba ya casi concluido: “El rey don Fernando ha mandado ensanchar muchas calles, derribar algunas casas y hacer mercados. Ordenó, además, demoler la judería, donde habitaban más de veinte mil judíos, construyendo a sus expensas en el lugar que ocupaba un gran hospital y una magnífica iglesia en honor de la Virgen, destinada a sede episcopal, templo que alcanzamos a ver terminado hasta las bóbedas y ya con el tejado puesto”. El cabildo debió trasladarse a este nuevo recinto desde su residencia en la Alhambra en 1495, una vez finalizado y provisto el edificio de todo lo necesario para poder desarrollar en él su labor cultual. En el coro se habría instalado un órgano, ya que desde la erección de la catedral en 1492 se había dotado la plaza de organista con un salario de 10.000 maravedís. En este edificio estarían hasta finales de 1507, cuando se trasladaron a la antigua mezquita mayor de la ciudad que había sido acondicionada para desempeñar su función como sede catedralicia. El cabildo hizo entrega de la iglesia a los franciscanos el 8 de octubre de 1507 (aunque no lo abandonaron hasta Navidad): “dándole juntamente con el dicho templo el retablo del altar mayor, órgano y sillas de coro por disposición de los reyes”.