Estancia de los reyes católicos en Granada (1499)

Los reyes católicos estuvieron alojados en su palacio de la Alhambra entre el 2 de julio y el 30 de noviembre de 1499. La entrada en la ciudad tuvo que ser por la puerta de Elvira, tras la que recorrerían la calle Elvira, plaza Nueva, la cuesta de Gomérez hasta entrar en el recinto alhambreño por la puerta de la Justicia. La comitiva iría precedida de sus instrumentos heráldicos, trompetas y atabales, y algunos de sus ministriles. Llegarían acompañados de sus capillas respectivas y de alguno de sus músicos de cámara. En estos desplazamientos no siempre les acompañan todos sus efectivos musicales, cuyo número dependería del tiempo que pensaran permanecer en un lugar y de la importancia de los acontecimientos acaecidos. En la segunda mitad de 1499, los monarcas tenían asalariados los siguientes músicos:

Casa real	Cantores	Ministriles	Instrumentos heráldicos
Isabel I	31	5	10
Fernando II	18	8	13

Trompetas y atabales, además de acompañar los desplazamientos de los monarcas, anunciaban la presencia del rey en cualquier ocasión ceremoniosa, incluso cuando se sentaba a la mesa. Los ministriles participaban en ceremonias públicas y privadas, amenizaban las comidas y servían de acompañamiento a la danza. Entre los cantores compositores de los monarcas en ese momento podemos destacar a Francisco de Peñalosa, en la capilla del rey, y a Juan de Anchieta, en la capilla de la reina. Más difícil resulta precisar exactamente qué instrumentistas de cámara estuvieron presentes en esos meses de estancia en la Alhambra, pero pudieron acompañar a la comitiva los vihuelistas Rodrigo Donaire y Vicente Ferrer, el laudista y vihuelista Alonso de Baena y el organista Lope de Baena que en esos momentos se encontraban al servicio de los reyes.