Vicisitudes del último órgano del convento de Nuestra Señora de la Merced

Ruiz Jiménez, Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988

Palabras clave

órgano , arreglo de órgano , Antonio Otín Calvete I (organero) , Valentín de Verdalonga (organero)


El convento de Nuestra Señora de la Merced, fundación del rey Fernando III, debió contar con un órgano desde fechas tempranas. Entre 1603 y 1613 se construye una nueva iglesia, trazada por Juan de Oviedo y de la Bandera, maestro mayor de obras. El coro alto se situó a los pies de la nave y era “muy espacioso, sobre robusta bóveda que cubría el [coro] bajo”. Su sillería tenía dos cuerpos de sillas “con asientos para más de ciento y cincuenta religiosos” y tenía “un costoso y vistoso atril para los libros de canto”, además de un facistol que se remataba con “el Niño Jesús que [...] es de manos de Juan Martínez Montañés”. Poseía igualmente su librería coral y un órgano. Este instrumento se encontraba situado en una tribuna, en el lado de la Epístola, cerca del coro, sobre el retablo de San Rafael “con el retrato del Ilustrísimo Señor Don Francisco Domonte, es de D. Bartolomé Murillo”.

Tras la exclaustración del convento, en 1809, el cura de la parroquia de Santa Catalina, José de Hoyos Limón, solicitó que le fuese concedido el órgano que había en la iglesia conventual de la Merced. Según los recibos conservados, en mayo de 1810, el carpintero Juan de Carmona recibió 500 reales por el quitar la caja del órgano y trasladarla a Santa Catalina y Antonio Otín Calvete otros 300 reales por desmontar el instrumento. Este mismo cura fue el que concertó con Valentín Verdalonga, estante en Sevilla, que con los elementos del órgano de la Merced recompusiera el órgano de Santa Catalina, guardándose en unos almacenes la caja y los restos del instrumento mercedario. Verdalonga usó del órgano de la Merced los registros de “flautado de trece, trompeta real y trompeta magna”, valorados en 6.000 reales, y percibió por su trabajo 3.143 reales y 17 maravedís, proporcionando a la iglesia de Santa Catalina un instrumento que podía tasarse aproximadamente entre 28.000 y 30.000 reales.

Tras la expulsión de los franceses, los mercedarios volvieron a su templo y reclamaron al cura de Santa Catalina la devolución del órgano. Tras una serie de disputas entre ambas partes, la comunidad mercedaria se consideró satisfecha con la devolución de los restos que quedaban del instrumento y un pago de 5.000 reales de vellón por parte de la fábrica de Santa Catalina que fue efectuado el 4 de agosto de 1814. A continuación se encargó a Antonio Otín Calvete la reparación y puesta en funcionamiento del órgano recuperado.

Exclaustrado el convento de la Merced para convertirlo en Museo de Pinturas, el órgano fue trasladado a la iglesia de San Miguel. Félix González de León nos informa, en 1844: “El órgano [de la iglesia de San Miguel] que está sobre el coro, aunque construido por el maestro Berruguete, era malo, de pocos registros y solo tenía un flautado regular, por lo que en la actualidad se ha quitado y en su lugar se ha colocado el que fue de la iglesia de la Merced”. La pista del órgano del convento de la Merced se pierde en 1868, cuando la iglesia de San Miguel fue derribada. La parroquia de San Miguel residió a lo largo de dos años en las de San Lorenzo, San Vicente y la capilla del Museo, hasta que, en 1870, se les concede la iglesia de San Gregorio, lugar en el que permanecieron hasta 1899, cuando se establecen definitivamente en el convento de San Antonio Abad. Según un inventario realizado en 1922, la parroquia conservaba todavía una serie de enseres en la iglesia de San Gregorio, entre ellos un órgano y un armonio. Podría tratarse del órgano del antiguo colegio de San Gregorio o de los ingleses o del órgano ambulante de la Merced que terminara en esta ubicación acompañando a la parroquia en su itinerancia.
Fuente:

Bibliografía:

GONZÁLEZ LEÓN, Félix. Noticia artística histórica y curiosa de todos los edificios públicos, sagrados y profanos de esta muy noble, muy leal, muy heroica e invicta ciudad de Sevilla. Sevilla, Imprenta de D. José Hidalgo y Compañía, 1844, vol. 1, p. 35; MARTÍN PRADAS, Antonio. Sillerías de coro de Sevilla. Análisis y evolución. Sevilla, Guadalquivir ediciones, 2004, pp. 263, 371-374.

Creado: 08 May 2017
Modificado: 23 Jun 2019
Referenciar: Ruiz Jiménez, Juan. "Vicisitudes del último órgano del convento de Nuestra Señora de la Merced", Paisajes sonoros históricos, 2017. e-ISSN: 2603-686X. https://www.historicalsoundscapes.com/evento/648/sevilla.
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Recursos

Iglesia del convento de Nuestra Señora de la Merced (actualmente Museo de Bellas Artes). Fotografía de Juan Ruiz Jiménez

La aparición de la Virgen de la Merced en el coro a San Pedro Nolasco. Juan Luis Zambrano (convento de Nuestra Señora de la Merced, actualmente en la catedral de Sevilla)

Batalla de clarines de sexto tono. José Blasco de Nebra