Festividad de la Natividad del Señor en la catedral de Granada
Ruiz Jiménez,
Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988
Resumen
La consueta (siglo XVI) y la regla de coro (XVIII) de la catedral de Granada nos permiten conocer con detalle el despliegue ceremonial y litúrgico de esta institución durante la celebración de la festividad de la Natividad del Señor.
Palabras clave
fiesta de la Natividad de Nuestro Señor , maitines de la fiesta de Navidad , vísperas , completas , laudes , tercia , misa , cabildo de la catedral , capilla musical de la catedral , organista , capellanes , sochantre , seises , ciudadanos
Para la redacción de este evento he partido de dos documentos que regulan y sistematizan los principales elementos del ritual en cada una de las fiestas del año litúrgico: la Consueta [1] (redactada en las primeras décadas del siglo XVI) y la Forma y práctica que observa esta Santa Yglesia Aposthólica y Metropolitana de Granada en solemnizar todas las festividades del año [2], una regla de coro escrita en el siglo XVIII.
La festividad de la Natividad del Señor se iniciaba con las Vísperas el día 24 de diciembre. Su rango festivo era de primera clase y el color de sus ornamentos blanco. En el altar mayor se disponían los seis candeleros grandes [2], celebraba el deán [1, fol. 9r] [2] y seis prebendados se revestían de capas [2]. Al menos en el siglo XVI y en la sede de la antigua mezquita mayor adaptada al culto cristiano se colgaban los tapices “del Apocalipsis y otros paños” [1, fol. 30v].
* Primeras Vísperas:
Los salmos 1º, 3º y 5º, el himno [Jesu redemptor omnium] y el magníficat se cantaban a 8 voces o “con papeles” (pliegos con particellas) [2].
El salmo 4º se interpretaba “alternative con el choro” [2].
* Completas:
Tocaba el órgano [2].
* Maitines:
Se tañía con las campanas en la torre de 11 a 12 de la noche [1, fol. 37v] [2].
Había seis prebendados con capa [2].
A excepción de los responsorios, todos los maitines eran cantados [1, fol. 4v] [2]. Se decían muy despacio por lo que duraban tres horas y media [1, fol. 6r, 48r].
Se cantaban 8 villancicos [2]. Según la Consueta: “Las canciones que en ellos se dicen han de ser muy devotas e muy honestas e muy adaptadas a la santa fiesta e no se diga ninguna sin que primero sea examinada por el presidente e dos personas del cabildo, las cuales dicen los cantores e los que tienen mejores voces…” [1, fol. 48v-49r].
Había rondas. Se refiere a los grupos que se encargaban de pasear por el templo para mantener el orden y compostura de los fieles a lo largo de todo el ritual nocturno [2].
Invitatorio y Te Deum se cantaban “a canto de órgano” [2].
El Benedicamus se cantaba a “ fabordón” [2].
Terminado el Te Deum, el preste cantaba una oración a la que seguía la misa [2].
* Misa del Gallo:
Se cantaba en polifonía a cuatro voces [2].
* Laudes:
Se cantaban terminada la misa del Gallo [2].
* Prima
Se tañía a prima desde las cinco a las seis de la mañana [1, p. 49r]
* Misa del Alba:
Se cantaba inmediatamente después de acabada Prima. En ella había también 6 prebendados con capa, pero no asistía la capilla de música [2].
* Tercia:
Se tañía a Tercia desde las 8 a las 8,30 [1, p. 49r]. Había dos repiques antes de las 9, hora en la que entran a Tercia, la cual es solemne [2].
Había procesión y ofrenda [2].
* Misa [de Tercia]:
Había 6 prebendados revestidos con capas [2].
Se cantaban a 8 voces los Kyries y el Gloria; el Credo, Sanctus y Agnus Dei a 4 voces, “y así los dos días siguientes” [2].
Se cantaban villancicos [2].
* Segundas Vísperas:
Se cantaban a cuatro voces los salmos 1º, 3º y 5º, el himno [Jesu redemptor omnium] y el magníficat [2].
